Entonces ahora la historia que estás contando, y está bien porque no puedes contar una historia lejana a dónde estás. Pero ahora estás esencialmente argumentando a favor de tus limitaciones un poquito. O sea, nos estás diciendo cuánto lo deseas y te decimos, “¿y?” O sea, no le tienes que justificar al Universo lo mucho que lo deseas para que el universo te lo de.
Las palabras no enseñan en lo absoluto. Es tu experiencia de vida que te trae tu conocimiento. Pero cuando escuchas palabras con igual vibración que el conocimiento que has acumulado, entonces a veces, es más fácil para ti el clasificarlo.