Cuando haces las paces con quienes difieren en deseos, creencias y comportamientos con tus ideas de qué es apropiado, no perpetúas lo que consideras está equivocado. En su lugar, te alineas con la solución que te ha estado esperando en tu Vórtice de Creación.
Te animamos a que hagas las paces con todos tus opositores y con todos a quienes tú te opones, no sólo porque no puedes insistir en que cedan hacia tu perspectiva, sino porque su perspectiva opositora es de tremendo beneficio para ti.
Quisiéramos que llegaras a un estado donde no estás dispuesto a escuchar a la gente criticándose. Donde no te da satisfacción el que alguien se equivoque. Donde te importa tanto sentirte bien, que estás dispuesto sólo a pensar cosas positivas de la gente, y estás dispuesto sólo a mirar sus aspectos positivos. Donde estás dispuesto sólo a buscar soluciones y no estás dispuesto a tocar al ritmo del tambor de los problemas del mundo.
Si tu comportamiento está influenciado por tu deseo de hacer feliz a otra persona, perderás tu conexión con tu Fuente. Y no te es posible ser feliz salvo que estés alineado con tu Fuente. Sólo cuando estás alineado con tu Fuente tienes algo para ofrecer a otros.