Con frecuencia crees que debes trabajar duro para superar obstáculos y satisfacer escasez y resolver problemas; pero a menudo, con esa actitud o perspectiva, trabajas en contra tuya sin darte cuenta.
Si decides que no tienes que esperar a observar algo bueno para emitir una señal que le calza a lo que consideras bueno, entonces solo lo que consideras bueno podrá ser logrado por ti.
La manera como te sientes es tu punto de atracción, por lo tanto, la Ley de la Atracción se entiende mejor cuando te ves como un imán, recibiendo cada vez más según cómo te sientes.